El clima y la gran variedad de flores que crecen en Arnes - comarca de la Terra Alta -, en especial el romero, el tomillo, la lavanda y la flor de almendro, lo convierten en un lugar idóneo para recoger miel de primera calidad y excelente sabor. Y, igual que Arnes, el Perelló se ha convertido en uno de los últimos lugares con apicultores artesanos de Tarragona. El "pueblo de la miel", como se conoce este pueblo por su larga tradición en la apicultura, es el primer productor de miel de naranjo y romero del territorio catalán, y uno de los únicos lugares donde la elaboración de miel se realiza en invierno.