La zona de Berrús, ocupada por las tropas republicanas desde el mismo día 25 de julio, era una posición concebida con un doble objetivo: defender la cabeza de puente de Riba-roja d'Ebre y proteger la retaguardia del altiplano de la Pobla de Massaluca.

Las trincheras de Berrús serpentean por la parte superior de una empinada barrancada para controlar cualquier acceso desde la Riera de Berrús o el antiguo camino de Riba- roja d'Ebre a la Pobla de Massaluca (actual TV-7411). Por este motivo, la trinchera sigue el diseño clásico en zigzag, pero su profundidad es muy variable, y tiene los puntos más reforzados y avanzados en los pozos de tirador con alcance de tiro sobre los posibles accesos.

El sistema defensivo se complementaba con una trinchera secundaria que rodea la cota más elevada y protegía a la retaguardia de la trinchera principal.