La torre de Camarles aprovecha los restos de una antigua fortificación islámica. Es de planta circular con gruesas paredes de piedra. Recientemente ha sido restaurada y lo han adaptado para la visita de los turistas. Se ha construido un mirador desde dónde se obtiene una panorámica excepcional del delta del Ebro.

En el mismo municipio también podemos encontrar la Torre de la Granadella. En este caso se trata de una construcción medieval de planta cuadrangular con ventanas adoveladas y una capilla más moderna dedicada a Sant Marc. Las dos torres formaban parte del grupo de fortificaciones que recorrían la antigua costa marítima.